En muchas ocasiones, señalar que alguien o algo tiene ángel, es destacar sus virtudes, bondades, cualidades, capacidades, y tantos otros calificativos que se van a encargar de enaltecerlo; y en esta oportunidad, vamos a escribir sobre un vino sanjuanino que lleva enlazado en sus espaldas un verdadero ángel: se lo conoce como Angela Corado, y tiene muchos gratos momentos por recorrer.
En el Valle de Tulúm en la provincia de San Juan, se ubica la bodega Angela Corado a una altitud de 600 msnm, su sistema de conducción es de parral, con cosechas que van de 15.000 a 18.000 kilos por hectárea y lleva una guarda en barricas de madera francesa y americana, el cual está en condiciones de guardarlo aún unos años más.
Este vino se presenta como un varietal 100% merlot, su aspecto visual ofrece un color rojo rubí intenso, con algunas tonalidades violáceas, sus aromas son muy complejos, expresando notablemente al coco por su paso de barricas americanas, combinado con frutos rojos maduros de moras y grosellas, y en boca con un ataque dulzón, muy aterciopelado, con taninos increíblemente amables, persistente y muy equilibrado.
Quiero destacar que el merlot de Angela Corado es una gran recomendación que me hizo llegar la vinoteca Rincón de Cuyo y en realidad, uno no exagera al pensar en que este varietal nos demuestra que un vino, como muchos otros placeres de la vida, también posee su ángel de la guarda. Bon Appetit.